Te recuerdo.
Las bocanadas de oxígeno que son tus caricias para mi
piel asfixiada.
Te recuerdo.
Tu agua en mi boca saciando esa sed que nunca nada si no
tú logra calmar.
Te recuerdo.
Ciego en la oscuridad del silencio que es tu voz
inexistente.
Te recuerdo.
Encogido en mí, solo, sitiado por todo lo que no soy
capaz de vencer: tú, ausente.
Te recuerdo.
¿Eres cierta o eres una creación que necesito para no
caer en el vacío de una existencia sin sentido?
Te recuerdo.
¿Es verdad lo que recuerdo?
Te recuerdo.