Los besos y la luna van íntimamente ligados, aunque haya
quien dude de ello.
Ciertamente se puede dar cualquier tipo de beso en cualquier
momento pero, al igual que un vino concreto nos produce un mayor deleite al
beberlo mientras comemos un queso determinado u otro alimento que ‘le vaya’, maridaje
se dice ahora, los besos también tienen su maridaje con la luna haciendo que
nuestro deleite sea mayor si lo seguimos.
Nuestro consejo es que los besos han de ser: Alunados con
la luna menguante, alucinados con la luna nueva, luneros con la luna creciente y plenos con la luna llena.
A disfrutar y ¡Buen provecho!