viernes, 10 de mayo de 2019

Salida.


Las antes confortables paredes que me rodaban y protegían se han enfadado conmigo y han empezado a encogerse y estirarse, encogerse y estirarse, dejando cada vez menos espacio para mí.

He intentado resistirme a ellas pero son mucho más fuertes que yo y me han empujado por una especie de pasadizo angosto del que, poco a poco, empujado todavía por ellas, voy saliendo a un lugar inhóspito, frío, seco, luminoso hasta hacer daño.

¿Cómo podré sobrevivir ahí?

  • Alicia, ha tenido usted una niña. Es una niña monísima, debe pesar unos tres kilos. Para ser una recién nacida tiene un gesto adusto y firme, como si dijese: Aquí estoy, a ver qué pasa.